Abusos contra los niños de la calle

Resumen

Algunos oficiales de policía ayudan a reintegrar a los niños de la calle con sus familias y los protegen de los adultos abusivos. Pero muchos niños de la calle viven con miedo de las fuerzas destinadas a protegerlos a ellos y a todos los demás civiles. Policías ordinarios, policías militares y soldados amenazan, roban, golpean y acosan a los niños durante el día y la noche cuando duermen. Bajo amenaza de arresto y encarcelamiento, los niños son obligados a entregar dinero o bienes materiales a hombres uniformados. En los peores casos, los policías reclutan niños para robar y saquear a cambio de una parte del botín o una pequeña suma de dinero. En términos más generales, la policía utiliza a los niños de la calle para ayudar en operaciones encubiertas, vigilar las escenas de robos o actuar como señuelos. Los niños de la calle también se ven obligados a proporcionar información sobre el paradero de otros niños de la calle o de otras personas sospechosas de delitos. Los niños que realizan estas actividades en nombre de la policía corren el riesgo de ser encarcelados o golpeados por no cumplirlas.